6 paisajes para disfrutar del otoño

El otoño ha llegado a nosotros poco a poco y sin que lo notemos: en las próximas semanas, los paisajes se tiñen de tonalidades únicas que llenan los árboles y hojas de fuertes rojos y amarillos anaranjados. Por ello, se trata de una buena ocasión para viajar, salir y disfrutar de estos espectaculares escenarios que nos ofrece la naturaleza. En ALSA te proponemos seis paisajes para que disfrutes del otoño dentro y fuera de la ciudad.

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Valle del Leza (Logroño)

En el valle del río Leza, en La Rioja, se encuentra uno de los parajes más mágicos de nuestra geografía. Y es que en todo este entorno que abarca múltiples pueblos y aldeas riojanas, es característico observar el encanto de las terrazas de cultivo de vides entre las grandes montañas que lo envuelven. Una oportunidad para admirar un despliegue de colores especial, y disfrutar de esta magnífica Comunidad Autónoma que nos ofrece uno de nuestros mejores vinos.

Bosque de la Alhambra  (Granada)

No siempre es necesario salir de la ciudad para disfrutar de paisajes espectaculares, como ocurre con los bosques que rodean la Alhambra, en Granada. Y es que en esta ciudad es difícil aguantar la emoción en un espacio tan artístico y con tanto valor cultural como es el entorno andalusí de la Alhambra. Así, envolviendo el conjunto palatino nazarí, se encuentra un conjunto de bosques que enriquecen el valor de esta joya arquitectónica de nuestra geografía. Se trata de un paisaje frondoso y rico en vegetación, gracias a las acequias y canales que riegan el paraje, conformado por una fusión de especies de hoja perenne y caduca. Especialmente recomendable es pasear por el bosque de Gomérez o acceder al mirador del Albayzín y sentarse a observar este conjunto de obras de arte.

alhambra

Parque Natural de Somiedo (Asturias)

Encajado en el área central de la Cordillera cantábrica y encerrando al municipio asturiano de Somiedo, este parque fue declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en el año 2000. En este caso, los bosques forman una cuarta parte del paraje y lo conforman una gran multitud de especies, entre las que es destacable el quejigo, una especie mediterránea que en esta Comunidad solo está presente en este Parque y en el río Cares. Además, posee amplias praderas y lagos, con una rica fauna, entre la que puede destacarse el oso pardo, el lobo, el urogallo cantábrico o el águila real.

somiedo. Autor: Yuval Y

Parque Nacional de Monfragüe (Cáceres)

Declarado Parque Nacional en 1979, este paraje extremeño ofrece actividades únicas durante los meses de otoño. Las primeras lluvias de septiembre y octubre dan paso a la temporada de berrea, en la que los ciervos comienzan su período reproductivo con luchas de cuernos y fuertes bramidos dignos de oír. Por otro lado, se trata de una temporada exclusiva para observar este entorno natural en su mayor esplendor, en el que los bosques de encinas de hoja verde perenne se funden con los tonos rojizos y amarillentos de las hojas de los castaños y robledales. Un momento único en el que poder sentir los contrastes visuales que nos regala la provincia de Cáceres.

Parc de la Ciutadella (Barcelona)

Se trata de uno de los parques más populares y antiguos de Barcelona. Su extensión es tan grande que llega a abarcar el Zoo de Barcelona  y el Parlamento de Cataluña, entre otros edificios importantes. Además, posee una rica vegetación que consigue proporcionarle un toque mágico a su estanque. Entre otros, es abundante la cantidad de palmeras que hay en la zona, pero también existen multitud de especies que en otoño impregnan de hojas los suelos arenosos del parque, y convierten un paseo en una experiencia única en la capital catalana.

Parque del Buen Retiro (Madrid)

El parque por excelencia de la capital madrileña es El Retiro. Se trata de un espacio histórico creado en tiempos de Felipe IV, donde se reúnen grandes obras escultóricas y naturales, acompañadas de un hermoso estanque con embarcadero. Además, este conocido parque es especialmente recomendable durante la temporada otoñal, ya que posee una gran riqueza en su vegetación. Allí se ubican grandes joyas botánicas de nuestro país, como el cedro del Líbano, con más de 100 años de antigüedad, o el Ahuehuete del Parterre, que posiblemente fue plantado durante el siglo XVII.

Madrid. Autor: Harvey Barrison

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