ALSA: Los autobuses más cómodos para viajar
Puede que, alguna vez, cuando hayas pensado muy para tus adentros en hacer un viaje en bus, te hayas autovisualizado a ti mismo sudando y pasándolo mal apretado entre 30 señoras que, bolsa de «estuve en Torrevieja y me acordé de ti» en mano, se dirigen orgullosas a sus vacaciones de verano. Pero tranquilo, porque desde ALSA hemos venido a escribir este post solo para ti y así aclararte la nueva realidad en la que vivimos.
Solo te escribimos para decirte que, amigo, el siglo XXI ha llegado (has tenido 18 años para asimilarlo), y con él, Internet, las cosas táctiles y el aire acondicionado. Se acabaron esos viajes interminables al pueblo en un bus que parecía que nunca iba a llegar. Se acabaron esas canciones repetitivas en las que incitas al conductor a acelerar aunque haya atasco o un radar en la autopista. Despídete de la agonía de no caber en el asiento o de que te aburras de contar toros de Osborne en la carretera. Hoy venimos para decirte que, viajando con nosotros, puede que lo pases incluso mejor que en el destino que visitas. Aquí te contamos todo (o casi todo) lo que puedes hacer en un viaje en bus con ALSA:
1. Domirte la siesta de tu vida después de venir de empalmada de un festival
Pongámonos en la situación de que llevas todo el fin de semana dándolo todo en el Bilbao BBK Live, has apurado al máximo y has cogido el bus de vuelta de empalmada. Porque tú eres así, te gustan las emociones fuertes y vivir al límite. Y nosotros no tenemos ninguna objeción, que conste. De hecho, con nuestros asientos te lo ponemos fácil para que puedas estirar un poco las piernas, reclinarte otro poco hacia atrás y dormir lo que no has dormido en tres días. El asiento del bus te atrapará irremediablemente y será la mejor siesta de tu vida. No nos hacemos responsables de cualquier ronquido emitido durante el trayecto. ¡Incluso disponemos de horarios nocturnos en muchos de nuestros trayectos para que te ahorres una noche de hotel! En definitiva, el bus es un buen lugar para descansar.
2. WhatsAppear a tu rollo de verano
Vienes de la playa triste y melancólico porque tu amor de verano se ha quedado allí y tú tienes que trabajar. Parecía que no, pero cinco días en Alicante han dado para encontrar a tu media naranja (o sandía, que suena más a verano). Sientes que te gusta y te planteas una relación a distancia porque de pequeño veías ‘El Diario de Patricia’ y llorabas con lo bonitas que eran esas historias de amor. No te preocupes, nosotros confiamos y apostamos por esa relación y por eso te ofrecemos wifi gratis durante todo el viaje con nuestros buses. También sabemos que, al ser un amor muy apasionado, es posible que la batería de tu teléfono se agote pronto, pero no te preocupes. Nosotros, que estamos en todo, contamos con enchufes en cada asiento para que conectes tu cargador y des rienda suelta al amor a golpe de emojis.
3. Pasar una tarde perfecta de mantita y peli mientras viajas
Bueno, quizá ahora lo de ‘mantita’ se te vaya un poco de las manos en verano. Pero qué mejor que aprovechar un viaje para ver alguna peli o serie. Si no has sido de esas mentes precavidas que se la traen descargada de la tablet de casa, no te preocupes. Cada vez contamos con más autobuses con pantallas individuales y un más que variado catálogo de contenidos para que veas a bordo lo que más te gusta. Cambia el sofá de tu casa por uno de nuestros asientos y disfruta de un viaje, pongamos que a Granada, de lo más cinéfilo.
4. Escuchar en bucle ‘Lo malo’ porque aún no lo has superado
Ana War ha sacado nuevo single pero a ti eso te da igual. Sigues anclado en febrero de este año y no consigues encontrar un temazo igual. Te levantas pensando en ‘Lo malo’ y te acuestas pensando en ‘Lo malo’. Está presente en todas tus listas de Spotify porque no te cansas (tus vecinos a lo mejor sí) y se lo pides al Dj de la discomóvil de las fiestas de tu pueblo de Murcia o de León. Pero, ¡cáspitas! Un buen día llegas al bus y descubres que se te ha olvidado meterlo en tu lista del móvil. No pasa nada. Ponte los auriculares, conéctate a nuestro Wifi o nuestras pantallas y disfruta con Aitana War (y con quien quieras) todo el viaje. Sin parar.
5. Autoconvencerte de que vas a leerte ese libro que nunca te lees
Siempre barajas la lectura como una de tus posibilidades de entretenimiento a la hora de viajar en bus. Este año veraneas en Asturias, así que necesitas algo que enganche para leer también en la playa. Te motivas y tardas en elegir ese libro que crees que vas a leer. Incluso llegas a sacarlo de tu mochila durante el viaje y haces una foto y la subes a Instagram con los hashtags tan socorridos como «#relaxtime», «#travel», «#reading», «#picoftheday» y por supuesto con el hashtag «#ALSAgram» (para participar en nuestro concurso mensual de Instagram en el que sorteamos 10 billetes gratis entre las mejores fotos que hayáis subido a vuestro perfil público en un viaje en ALSA y que estén etiquetadas con el hashtags #ALSAgram). Pero la cruda realidad es que nunca pasas de la página 15. Pues bien, este viaje en ALSA puede ser el momento perfecto para lanzarte al vacío y leer. Lo mismo incluso te encanta y te terminas el libro.
6. Pensar qué vas a hacer cuando seas influencer
Sí, lo que lees. Sabemos que, aunque criticas a todos los instagrammers y dices no entender su fama, utilizas todos los hashtags habidos y por haber y desatas tu ira con tu mejor amigo cuando no ha cogido el mejor encuadre para hacerte tu futura publicación. Haces de tu vida una sucesión de stories y eliges minuciosamente tu ropa en cada foto. Por eso, viaja tranquilo este verano sabiendo que con nosotros no tienes un límite de peso/equipaje al viajar. En tu maleta cabrán todos los bañadores de sandías o frutas aleatorias que has comprado este verano y esas chanclas que crees que son originales, pero no.
Hagas lo que hagas durante tu viaje, con nosotros lo vas a disfrutar porque tenemos todas las comodidades para ti. Además, con ALSAcab puedes comenzar a disfrutarlo desde que sales de casa ya que te llevaremos en coche de lujo con chófer a la estación de autobuses desde la dirección que nos indiques o a casa (cuando vuelvas de las vacaciones).
Este verano, muévete mejor con ALSA y disfruta antes, durante y después de tu viaje.